¿Qué es el punto G?

Nos encantaría darte la definición precisa, concisa e inequívoca del punto G, dónde localizarlo y cómo debes estimularlo para estallar de placer.

Pero la realidad es que, a pesar de haber sido estudiado por más de medio siglo, hoy en día, la ciencia aún no ha determinado la existencia y ubicación del punto G como estructura orgánica observable. Lo único que sabemos a ciencia cierta es que fue el ginecólogo alemán Ernst Gräfenberg el pionero en estudiarlo y es en su honor a quien se debe el nombre del punto G.

Gräfenberg sitúa el punto G internamente detrás del pubis y alrededor de la uretra. Se trataría de un área erógena que, al ser estimulada, llevaría a la mujer a una fuerte excitación sexual, provocando orgasmos intensos.

No obstante, diversas investigaciones no han podido ubicar el punto G; muchos sostienen que no es realmente una parte distinta de la anatomía femenina. Algunos defensores de su existencia sostienen que el punto G es el eje interno de la vagina y el clítoris y que por eso, su estimulación es la causa de una mayor intensidad de los orgasmos.

Lo cierto es que esta región puede variar dependiendo de cada mujer, lo cual explica por qué no hay un consenso de su ubicación. Los sexólogos advierten que muchas mujeres pueden sentirse frustradas por no conseguirlo y muchos hombres por no saber estimularlos.

Para nosotros, el punto G es un mero nombre digno de una sexshop, pues es el conocimiento pleno de tu cuerpo lo que determinará tu nivel de satisfacción, independientemente de que lo llames con cualquier letra del abecedario. Sabemos que ver y tocar, así como los aromas, los sonidos y los sabores, también pueden estremecerte; sabemos además, que más allá de si es un lugar específico o no de tu cuerpo, lo importante es que tú sabes cómo tomar las riendas y encontrar lo que te gusta.

No existe una fórmula única para lograr el orgasmo; la mayoría de las mujeres prefieren una combinación de estrategias. Simplemente encuentra lo que funcione para ti y disfrútalo y si eso significa que encontraste tu punto G, maravilloso, y si no, pues también es maravilloso mientras que realmente lo disfrutes y te sientas plena. 

Cuéntanos ¿has descubierto tu punto G?